El presidente de la Asociación de Empresarios Chinos en Cabo Verde afirmó hoy que el mercado caboverdiano presenta buenas perspectivas de futuro, pero apunta que desde el inicio de la pandemia los costos de importación se triplicaron.
El presidente de la Asociación de Empresarios Chinos de Cabo Verde afirmó que el mercado caboverdiano presenta buenas perspectivas de futuro, pero apunta que desde el inicio de la pandemia los costos de importación se han más que triplicado. "Antes pasábamos de 4.000 a 4.500 dólares por contenedor, pero durante la pandemia los costos subieron a 15.000 dólares y se hizo más difícil importar nuestra mercancía de China", reconoce Paulo Pan, el presidente de la asociación.
Admite que no todos los negocios de empresarios chinos en Cabo Verde consiguieron mantener sus puertas abiertas desde el inicio de la pandemia, periodo en el que el archipiélago, sin turismo, se sumergió en una profunda crisis económica y social. "Algunas tiendas tuvieron que cerrar por los costos en la importación de la mercancía, también el flujo de gente bajó mucho. En este momento comienza a aumentar, creo que las cosas mejorarán con la vacunación" agrega.
El empresario reconoce que la comunidad china en Cabo Verde ha hecho un esfuerzo "grande" para mantener la actividad, una vez que el movimiento fue débil, incluso en las época festiva, trabajando para apenas pagar los gastos. Incluso así, asegura Pan, estos pequeños empresarios y comerciantes no contemplan regresar a China, a pesar de que el mercado del archipiélago sea pequeño y del complicado periodo económico. "La mayoría de los chinos en Sao Vicente llevan más de diez años aquí y ya estamos integrados, tenemos familias y amigos. Yo estoy aquí desde hace casi 30 años, el clima es atractivo y la situación política es estable comparada a otras realidades" destaca el inversor.
Hace más de un año que la asociación viene ayudando a algunas empresas e instituciones como la Delegación de Salud, Fuerzas Armadas, Cámara Municipal de Sao Vicente y, escuelas y otros organismos en materia de protección, ayuda valorada en más de cuatro millones de escudos. También donaron juguetes, ropa y calzado a los niños caboverdianos en Navidad y prevén la construcción de un parque en la zona periférica de la isla de Sao Vicente, conocida como "Iraque". "Nosotros somos parte de la sociedad caboverdiana por eso queremos ayudar a pasar este momento difícil. Y estas ayudas son para retribuir como los caboverdianos nos acogen" afirma.
De acuerdo con Paulo Pan, la asociación integra más de 300 miembros de la comunidad china y ya se encuentra prácticamente toda vacunada contra el Covid- 19 con dos dosis de la vacuna. En este momento, dice, están incentivando a sus funcionarios caboverdianos a vacunarse.
Fuente: expresso das ilhas